Fundación Tiempo de Niños: Transformando vidas a través de la pasión y el compromiso
En el año 2010, un grupo de personas con un deseo profundo de hacer una diferencia en la vida de los niños y niñas de su comunidad se unieron para crear lo que hoy conocemos como la Fundación Tiempo de Niños. Su historia se entrelaza con la inspiración proveniente de la Organización Conin, una ONG nacional con sede en Mendoza, Argentina, que trabaja incansablemente para mejorar la calidad de vida de los más jóvenes.
Cuando la Fundación Tiempo de Niños se enteró de la admirable labor de Conin, se dispusieron a unirse a esta noble causa. Sin embargo, les esperaba un largo camino por recorrer. Para colaborar con Conin y su misión, primero debían convertirse en una organización con personalidad jurídica. Así nació la Fundación Tiempo de Niños, una entidad que ha demostrado un compromiso inquebrantable hacia el bienestar de los niños y niñas de Neuquén.
Lo que comenzó como un requisito legal se transformó con el tiempo en un refugio y hogar para una variedad de programas destinados a mejorar la vida de los más jóvenes. La Fundación Tiempo de Niños se dedica a proporcionar una base sólida para el crecimiento y el desarrollo de los niños a través de la buena alimentación y la estimulación temprana, en consonancia con la visión de Conin.
Además de estas iniciativas, la Fundación ha incorporado programas que abarcan desde el Centro Recolector de Leche Materna hasta el Banco de Sangre, pasando por el Canto Coral, el Ensamble y Percusión, y más recientemente, la Acrobacia. Estos programas ofrecen un amplio espectro de actividades diseñadas para enriquecer la vida de los niños y niñas, brindándoles oportunidades de crecimiento y aprendizaje.
La Fundación Tiempo de Niños no sería lo que es sin su dedicado personal. Cuenta con un equipo médico, pedagogos, fonoaudiólogos y maestras jardineras, todos comprometidos con la misión de la organización. La participación de las familias es fundamental, ya que asisten semanalmente a la Fundación, donde se les brinda una canasta básica de alimentos para garantizar una nutrición adecuada y el acceso a la educación de sus hijos de manera orgánica.
Héctor, fundador y líder de la Fundación Tiempo de Niños, define su organización como "un conjunto de personas que deciden, desde su condición como trabajadores, intervenir más allá de la queja, sin quedarse como meros espectadores, y entre todos desarrollar todas estas acciones". Este espíritu de acción colectiva y compromiso ha impulsado el éxito de la Fundación.
La Fundación está compuesta por un Consejo de Administración de diez personas, pero su estructura es mucho más amplia, ya que abarca varios programas y áreas. La organización cuenta con áreas de administración, jurídico, contabilidad, eventos, redes y recursos humanos, todas con el objetivo de recaudar fondos y consolidar sus programas y proyectos.
La comunidad de Neuquén ha respondido de manera ejemplar al llamado de la Fundación Tiempo de Niños. Siempre se esfuerzan por incluir al máximo número de personas en las actividades relacionadas con los niños, mostrando consideración hacia las madres y padres para hacerse más visibles y presentes en la comunidad. La colaboración en red con otras organizaciones civiles refuerza aún más su impacto y alcance.
Héctor, agradecido por el apoyo de todas las personas involucradas en la Fundación, desde quienes preparan las meriendas hasta los miembros del Consejo de Administración, reconoce la importancia de la unión y el compromiso en su labor. Fundación Tiempo de Niños es un testimonio de lo que es posible lograr cuando una comunidad se une en su empeño de brindar un futuro más brillante a sus niños y niñas. Con su dedicación inquebrantable, han demostrado que el tiempo que dedican a los niños es tiempo bien invertido en el futuro.
Facebook: Fundación Tiempo de Niños
Redacción: Abril Casanova
Comments